“No compito, solo me preocupa hacer que Linux se supere a sí mismo” Linus Torvalds
Los fans de Linux siguen creciendo en todo el mundo a pesar de que las cifras todavía se encuentran a una distancia astronómica del archiconocido sistema de las ventanas. En España, solo en el ordenador de escritorio, el 2,81% de los usuarios manifiesta utilizar esta plataforma, por encima de la media europea cuya tasa se sitúa en el 2,43%.
La libertad que ofrece al usuario y sobre todo, la eficiencia en el consumo de recursos son los dos principales argumentos de los defensores del pingüino. Los partidarios de este sistema ven en Linux un sistema operativo sólido, que aguanta el paso de los años sin influir prácticamente en el rendimiento del sistema. A pesar de que la conquista del terreno de escritorio queda a años luz, sabemos que la hegemonía de Linux en el terreno de servidores es indiscutible y que Android, el sistema operativo móvil más usado del mundo, utiliza el kernel de Linux, por lo que dar la espalda a esta opción tecnológica carece de sentido.
Siempre la bajo premisa de atender y dar respuesta a las necesidades reales de los usuarios, TP-LINK junto con los fabricantes de chipset de sus dispositivos han empezado a desarrollar actualizaciones para adaptadores USB compatibles con la plataforma Linux. Si bien en un primer momento, el fabricante se centró en el sistema de Microsoft, básicamente por atender la necesidad de una mayor base instalada de usuarios, ahora se centra en mercados menos masivos como Linux que también tienen las mismas necesidades de conectividad.
Con una partida de más del 8% de las ventas globales dedicadas a actividades de I+D, TP-LINK cuenta con un músculo innovador que le posiciona como referente dentro del mercado de conectividad por su capacidad para crear soluciones muy avanzadas tecnológicamente que respondan a los intereses y a las necesidades del consumidor. En este sentido, su introducción en el mundo Linux, tras el que ya ha avanzado que seguirá su apoyo al terreno Mac, muestran una vez más su habilidad para escuchar al mercado e identificar las demandas claves de los usuarios.
